¡Indignante! Una mujer encadenaba a su hijo y no le permitía ir a la escuela en el municipio de Zempoala, Hidalgo; así descubrieron el maltrato.
De acuerdo con la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo (SSPH), la mujer identificada con las iniciales D.G.G., fue aprehendida por ejercer violencia familiar en contra del niño de 11 años de edad.
Agentes adscritos a la Policía Violeta rescataron a un menor que era víctima de violencia familiar en el municipio de Zempoala.
Asimismo indicó que la detención se llevó a cabo en una vivienda ubicada en la colonia Mineral del Oro, ya que luego de varias denuncias acudieron a verificar la situación.
Rescatan a menor que era encadenado
La SSPH indicó que luego de recibir el reporte de constantes gritos, se trasladó hasta la vivienda, donde fueron testigos de la violencia flagrante.
Una vez que vio a los policías los agredió física y verbalmente para “ahuyentarlos” de su casa.
Cuando entrevistaron a la víctima de 11 años de edad, relató que además de ser golpeado, su mamá lo encadenaba.
También lo hacía dormir en el suelo y tenía prohibido ir a la escuela.
Luego de recabar la información y testimonios necesarios, la mujer fue detenida y puesta a disposición de las autoridades por maltrato infantil.
En tanto, el pequeño recibió atención médica para su valoración y posterior traslado al Centro de Atención a Víctimas, donde fue entregado a un familiar quien dará seguimiento al caso.
¿Qué es una crianza positiva y cómo aplicarla?
De acuerdo con el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), el 63% de los menos de 14 años de edad, sufren agresiones físicas y psicológicas como parte de su “formación”.
Es decir, que son víctimas de maltrato infantil para ser educados.
En el caso de México, los gritos, golpes y humillaciones para educar a los menores están normalizados, pues 6 de cada 10 de estas personas, entre uno y 14 años de edad han experimentado este tipo de “disciplina”.
Por ello, los especialistas recomiendan que la crianza positiva debe ser una de las bases más fuertes en el desarrollo de las personas desde una edad temprana.
La crianza positiva es un estilo educativo basado en el apego seguro. Es decir, que los padres o cuidadores se esfuercen en crear un vínculo fuerte con los hijos y así fomentar una relación de respeto y comprensión.
Entonces, en la crianza positiva se debe tomar en cuenta que:
Los menores deben ser reconocidos como seres humanos que tienen derechos y no como propiedad
Atender sus necesidades de desarrollo
Para dejar atrás los métodos violentos y autoritarios, es necesario aplicar los siguientes consejos para llevar a cabo la crianza positiva:
Comunicación y escucha activa entre menores y tutores, es decir, diálogo
Equilibrio emocional con la regulación emocional de padres o tutores
Disciplina centrada en límites y consecuencias, para aportar seguridad, estabilidad y responsabilidad
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